Descripción
Esta vela recuerda a una tarde de primavera en Andalucía, cuando el sol ya está bajando, los rayos iluminándolo cada rincón del patio de dorado, su valor acariciándote el rostro. Una suave brisa comienza suave a traerte el aroma de todas aquellas flores que te rodean.
Los geranios caen por la pared con suaves tonos rosados, el jazmín ha terminado de florecer cargando el lugar con su potente fragancia, también te llegarán algunas delicadas notas de azahar.
Todas ellas crean el ambiente intenso que inspiró a Lorca a crear sus obras, absorber sus propias raíces y plasmarlas sobre el papel, visualizar cada pequeño pétalo y darle un significado nuevo, amoldar esa naturaleza a su gusto.
Sara –
Una vela fantástica. El olor dura bastante tiempo incluso después de apagada y la mecha de madera es un puntazo por cómo crepita. Además me encanta la idea de que vengan en latitas reutilizables. ¡Repetiré seguro!
Juls –
Una vela estupenda para las mañanas o las tardes, con un aroma enérgico que se nota, ante todo, cuando la vela lleva un rato encendida y entras a la habitación. La mecha es un gran acierto por su material al añadir el siempre relajante y satisfactorio crepitar de la madera que se quema. Además, cuenta con una gran durabilidad y reutilización, puesto que es una vela grande que puede encenderse varias veces. Mi única y muy personal pega es que el olor se desvanece porque la nariz se acostumbra deprisa y dejas de respirar el aroma; pero por lo demás la temática es muy acertada respecto al olor floral y natural, y si no te gustan los olores muy intensos, lo que yo comento como pega puede ser para ti un punto a favor.
De todos modos, ha sido una muy buena compra que no dudaré en repetir, o que como mínimo me ha animado a probar el resto de velas de la tienda para encontrar mis favoritas.