Descripción
Con esta vela te transportarás a un paseo a las orillas del mar de las exóticas playas de Gyeongju.
Te verás caminando tranquilamente con los ojos cerrados mientras la brisa marina refresca tu cara, comiendo un helado sin preocupaciones, escuchando las gaviotas graznar y las olas acariciando la arena con suavidad.
Sentirás el frescor del agua tras un día de calor, el brillo del atardecer sobre un océano infinito que se lleva con él todo atisbo de desazón.
Javier –
Es increíble cómo la vela huele con solo abrirla, sin encenderla. Me encanta su olor tan suave y dulzón, sin llegar a empalagar. Me recuerda incluso al típico gel de ducha que tiene toques a coco o a almendra, tan suave y relajante.
Me ha gustado mucho la rapidez en que ha llegado todo a casa y los detalles que venían incluidos en la cajita, además de tener el puntazo de no usar ni un plástico en el proceso, cosa que suma muchísimo. Estoy deseando probar todas las velitas 🙂